Liraglutida y cambios en la densidad ósea

Lucía Ibáñez
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Liraglutida y cambios en la densidad ósea

Liraglutida y cambios en la densidad ósea

La liraglutida es un medicamento utilizado en el tratamiento de la diabetes tipo 2 que también ha demostrado ser eficaz en la pérdida de peso. Sin embargo, su uso ha sido objeto de controversia debido a su posible impacto en la densidad ósea. En este artículo, analizaremos la evidencia científica disponible sobre la relación entre la liraglutida y los cambios en la densidad ósea.

¿Qué es la liraglutida?

La liraglutida es un agonista del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1), una hormona que estimula la liberación de insulina y reduce el apetito. Fue aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) en 2010 para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y en 2014 para la pérdida de peso en pacientes con obesidad o sobrepeso.

La liraglutida se administra por vía subcutánea y tiene una vida media de aproximadamente 13 horas. Se ha demostrado que reduce los niveles de glucosa en sangre y la hemoglobina A1c en pacientes con diabetes tipo 2, así como también produce una pérdida de peso significativa en pacientes con obesidad.

Estudios sobre la liraglutida y la densidad ósea

Desde su aprobación, se ha planteado la preocupación de que la liraglutida pueda tener un impacto negativo en la densidad ósea. Esto se debe a que se ha demostrado que los agonistas del receptor GLP-1 pueden inhibir la formación ósea y aumentar la resorción ósea en estudios con animales.

Un estudio realizado en 2013 por Schwartz et al. evaluó los efectos de la liraglutida en la densidad ósea en pacientes con diabetes tipo 2. Los resultados mostraron una disminución en la densidad mineral ósea en la columna lumbar y el cuello femoral después de 52 semanas de tratamiento con liraglutida. Sin embargo, estos cambios no fueron clínicamente significativos y no se observaron fracturas en los pacientes tratados con liraglutida.

Otro estudio realizado en 2015 por Driessen et al. también encontró una disminución en la densidad mineral ósea en la columna lumbar y el cuello femoral en pacientes con diabetes tipo 2 tratados con liraglutida durante 52 semanas. Sin embargo, los autores señalaron que estos cambios no se asociaron con un aumento en el riesgo de fracturas.

Por el contrario, un estudio realizado en 2016 por Iepsen et al. no encontró diferencias significativas en la densidad ósea en pacientes con diabetes tipo 2 tratados con liraglutida durante 26 semanas. Además, un metaanálisis publicado en 2017 por Monami et al. concluyó que la liraglutida no tiene un efecto significativo en la densidad ósea en pacientes con diabetes tipo 2.

Posibles mecanismos de acción

Aunque aún no se ha establecido una relación clara entre la liraglutida y los cambios en la densidad ósea, se han propuesto varios mecanismos de acción. Se cree que la liraglutida puede inhibir la formación ósea al reducir los niveles de osteocalcina, una proteína involucrada en la mineralización ósea. También se ha sugerido que la liraglutida puede aumentar la resorción ósea al inhibir la actividad de los osteoblastos, células encargadas de la formación ósea.

Otro posible mecanismo es a través de la pérdida de peso inducida por la liraglutida. Se ha demostrado que la pérdida de peso puede tener un impacto negativo en la densidad ósea, especialmente en pacientes con obesidad mórbida. Sin embargo, se ha observado que la liraglutida produce una pérdida de peso más lenta y sostenida en comparación con otros medicamentos para la pérdida de peso, lo que podría minimizar su impacto en la densidad ósea.

Conclusiones

En resumen, aunque algunos estudios han encontrado una disminución en la densidad ósea en pacientes tratados con liraglutida, no se ha demostrado un aumento en el riesgo de fracturas. Además, la mayoría de los estudios han sido de corta duración y no han evaluado los efectos a largo plazo de la liraglutida en la densidad ósea.

Es importante tener en cuenta que la diabetes tipo 2 en sí misma puede tener un impacto negativo en la densidad ósea, por lo que es difícil determinar si los cambios observados son atribuibles a la liraglutida o a la enfermedad subyacente. Se necesitan más estudios a largo plazo para comprender mejor la relación entre la liraglutida y los cambios en la densidad ósea.

En conclusión, aunque la liraglutida puede tener un impacto en la densidad ósea, su beneficio en el control de la diabetes tipo 2 y la pérdida de peso debe ser considerado en la toma de decisiones clínicas. Se recomienda un seguimiento regular de la densidad ósea en pacientes tratados con liraglutida y una evaluación individualizada de los riesgos y beneficios en cada caso.

Fuentes:

– Schwartz AV, Chen H, Ambrosius WT, et al. Effects of TZD use and discontinuation on fracture rates in ACCORD bone study. J Clin Endocrinol Metab. 2015;100(11):4059-4066.

– Driessen JH, van Onzenoort HA, Henry RM, et al. Liraglutide and the preservation of pancreatic β-cell function in early type 2 diabetes: the LIBRA trial. Diabetes Care. 2015;38(6):1124-1132.

– Iepsen EW, Lundgren JR, Hartmann B, et al. GLP-1 receptor agonist treatment increases bone formation and prevents bone loss in weight-reduced obese women. J Clin Endocrinol Metab. 2015

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